“Ayuda en Acción me ha servido como ascensor”

Como muchos otros niños de su país, cuando Carlos no va a la escuela se tiene que ir al campo a ayudar a su padre, que trabaja en la caficultura. “Le ayudo abonando, chapeando, jalando el café… Eso los días que dejo de estudiar a las 12, los días que me quedo estudiando hasta las 5 me dedico a hacer tareas”, explica Carlos.

El resto del tiempo que tiene lo dedica a trabajar en el comité, a participar en los distintos talleres que organizan en su comunidad (globoflexia, pintacaras…). “Ser parte del comité me ha dado más habilidades. Ayuda en Acción me ha servido como ascensor, me está ayudando a ser cada vez mejor persona, a conocer más gente y a tener más oportunidades en mi vida”, cuenta riéndose.

COMPARTIR